Los retiros anticipados de ahorros para la jubilación afectan directamente a los afiliados a las AFP porque reducen sus futuras pensiones y también perjudican a todos los peruanos debido a que encarecen los préstamos e influyen negativamente en la generación de puestos de trabajo.
Así lo afirmó el exministro de Economía y asesor de la Asociación de AFP, David Tuesta, quien presentó el documento denominado “Una revisión de los impactos de corto y largo plazo de los retiros anticipados de los fondos de pensiones durante el COVID-19”.
Tuesta explicó que todo retiro anticipado de ahorros para la jubilación impacta directamente en las pensiones futuras de los afiliados, principalmente sino son focalizados en las personas que realmente lo necesitan, porque dar acceso a los fondos deteriora la inversión de largo plazo y porque ninguna de las normas que los permitieron se preocupó por determinar cómo se podría recuperar ese dinero.
“Este documento, que analiza el impacto de los cinco retiros de fondos realizados durante la pandemia, deja constancia de cómo la preferencia por el consumo presente afecta la futura pensión de los afiliados que retiraron sus ahorros y, además, detalla cómo influyen en la economía de todos los peruanos”, expresó el exministro.
Como ejemplo, dijo que un afiliado de 30 años de edad que hizo retiros, tomando en consideración el salario promedio de este segmento, perdió el equivalente a 15 años de aportes.
“Los retiros anticipados, para aquellos que mantienen un fondo en el Sistema Privado de Pensiones (SPP), significó el deterioro de las pensiones al reducir a cerca de la mitad el horizonte de ahorro de los afiliados más jóvenes, donde un afiliado de 30 años, con densidad de aportes del 50%, redujo hasta en 15 años su horizonte de inversión. Además, los afiliados entre 45 y 60 años tendrían que aplazar su jubilación hasta por 5 y 1 año, respectivamente, para recuperar lo retirado”, detalló.
Economía de todos
Respecto de cómo afectan los retiros anticipados a la economía de todos los peruanos, manifestó que está demostrado que los países crecen más cuando tienen mayores tasas de ahorro, y en los cinco retiros se han sacado del sistema cerca de 66 mil millones de soles.
“El mayor nivel de ahorro le permite a un país invertir más, tanto en proyectos públicos como privados, generando puestos de trabajo. Todo ello tiene efectos sobre el crecimiento, a través de incrementos en la productividad de la economía. Además, cualquier retiro temprano impacta negativamente en el mercado de capitales y, por ende, la disponibilidad de fondos prestables, encareciendo el crédito otorgado a las familias (hipotecas, préstamos o tarjetas de crédito)”, sostuvo Tuesta.
Igualmente, por los retiros anticipados, 2.33 millones de afiliados se han quedado sin fondos para la jubilación, exponiéndolos al riesgo de caer en pobreza durante la vejez, resultando una carga para el grupo familiar o para el Estado. Es decir, carga que deberemos costear todos los peruanos con el pago de impuestos.
“En resumen, los retiros anticipados han impactado en el deterioro del ahorro de largo plazo, en el mercado de capitales y son una carga social futura para el Estado. Todo esto se ha dado porque el retiro previsional temprano debe ser un mecanismo de última instancia y no volverse rutinario, como ya está sucediendo. Ahora se viene un sexto retiro y las consecuencias serán más duras”, concluyó Tuesta.
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