Elaborar un presupuesto es una tarea que la mayoría de peruanos no realiza a pesar de ser una herramienta útil para administrar el dinero y ahorrar. Esto lo comprenden mejor las personas de Lima, Arequipa y La Libertad, regiones donde más cuentas de ahorro se abren y, por el contrario, los departamentos con menor cultura del ahorro son Huancavelica, Tumbes y Amazonas.
«Un presupuesto nos asegura tener una dirección hacia el logro de una meta financiera y elimina la improvisación en el gasto, que tiene un impacto negativo en la economía personal o familiar», explica el gerente regional nor oriente de Caja Piura, Óscar Vílchez.
El ejecutivo señaló seis pasos para elaborar un presupuesto y ahorrar cada mes:
Defina una meta realista: Establezca en qué quiere usar el dinero, por ejemplo: pagar la inicial para comprar un departamento. Tenga claro el monto que necesitará reunir y en qué tiempo se propone para lograrlo.
Elabore una lista de sus gastos fijos mensuales: Coloque los pagos que se repiten todos los meses, como: comida, servicios, pensión del colegio o universidad, transporte y salud. Aproveche este momento para analizar qué gastos puede reducir o eliminar.
Considere los gastos variables: Si bien son montos que no se repiten todos los meses, un error frecuente es no preverlos. “El ahorro ayuda a tener un fondo de emergencia para afrontar los gastos variables inesperados cuando aparecen como un accidente”, sostiene Vílchez.
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Establezca una cantidad de ahorro mensual: Muchas personas solo ahorran si les sobra el dinero y a veces eso no sucede. La clave es priorizar el ahorro primero y luego disponer del dinero restante ajustando los gastos variables. “Considere ahorrar en una entidad financiera supervisada por la SBS con una rentabilidad atractiva y que tenga nulas comisiones”, por ejemplo “Que bonito es que no te cobren” es una campaña de la microfinanciera piurana para incentivar a los clientes en el uso de la cuenta de ahorro sin cobro de comisión de costo de mantenimiento.
Divida su dinero: Una equivocación común en los emprendedores es mezclar las finanzas personales con las del negocio. Debe tener distintos presupuestos para cada fin.
Registre todos sus gastos diarios: Detectará los famosos “gastos hormiga”, montos tan pequeños que no los consideramos, pero que si los sumamos en un período de tiempo se vuelven importantes. Por ejemplo, las golosinas y bebidas que se compran en la calle diariamente y que podrían ser reemplazadas por un snack y bebida de casa.
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